viernes, 14 de enero de 2011

UN DESPILFARRO EVITABLE

Una obra innecesaria, cara e impersonal


Lo primero que ha venido poniendo en cuestión la gente, o una buena parte de ella, al referirse a la obra de la Plaza de España ha sido su oportunidad. Si era algo tan necesario y urgente a llevar a cabo, que no podía esperar. También si no había antes otras prioridades donde invertir los doscientos setenta mil - o son más?- euros que probablemente habrá costado. Espero que podamos enterarnos del dato, cuando se liquiden las obras.

En el tema del procedimiento de adjudicación no vamos a entrar. Ahí está la Oposición del PSOE en el Ayuntamiento para controlar estos temas. Pero, claro, cómo no aludir a lo sospechoso que resulta que casi todas las obras que está ejecutando el gobierno PP-Par en el presente mandato las ejecute la misma empresa, bajo un par de nombres distintos. Quién hay detrás merecedor de tantas atenciones por parte del alcalde y Nasarre, pagaderas con dineros públicos?

El granito es un material lujoso. Es decir, muy caro, y como tal, en estos tiempos, absolutamente prescindible. Se puede encarecer todavía más, si el personal que lo coloca no está preparado para llevar a cabo un trabajo que requiere especialización. Eso lo podremos comprobar enseguida. La anterior plaza o el anterior pavimento hecho de materiales austeros y resistentes, había aguantado muy bien el paso del tiempo. Fue ejecutada directamente por el Ayuntamiento y por los excelentes albañiles que en Zuera siempre ha habido. Las anteriores farolas todavía prestan servicio en el Paseo Central del Parque del Gállego ( A no ser que estén fundidas o rotas como casi todas las del Parque).

Contribuciones especiales: no se han impuesto. Rompiendo la tradición e introduciendo una práctica totalmente discriminatoria con el resto las calles y plazas de Zuera, el alcalde y Nasarre han decidido que todo gratis. Es decir, a pagar entre todos. Habrán reparado ambos dos, los vínculos familiares que tienen con algunos propietarios afectados por las obras y lo injusto y desvergonzado que resulta su comportamiento?

El diseño no aporta nada nuevo, sólo da la sensación de que le han puesto a la plaza un caparazón, un pesado manto gris de granito. Siguiendo tendencias que ya no son novedosas, si vemos bien el intento de frenar el tráfico en las calles adyacentes, pero no hasta el punto de ver justificada la obra. De todas formar el tráfico en Zuera no necesita ser frenado, sino domesticado y a tal efecto se ha perdido una gran ocasión para actuar en las dos arterias adyacentes: calles Mayor y San Pedro. La obra de la plaza no deja de ser una caprichosa ñapa. Los bancos, para otro día, que tienen tela.



La ejecución. Yo diría que las obras han estado mal dirigidas y coordinadas. Han resultado un tanto caóticas. Además de lentas y muy perturbadoras de la vida cotidiana de la gente en general y en particular de las empresas del sector. La precipitación, la mala dirección y las faltas de criterio se han puesto de manifiesto en las numerosas y evitables rectificaciones y molestias y se pueden apreciar de manera muy evidente en los acabados de la obra. Losas mal colocada, piezas mal ajustadas, pésimas conexiones con las líneas de fachada, ausencia total de detalles de calidad (que nada tienen que ver con el elevado coste y el ostentoso aspecto del pavimento y el mobiliario urbano). Han hecho una obra basta, impropia del ayuntamiento, pero muy propia de las gentes que lo gobiernan. En definitiva, de malos profesionales.

Con todas estas premisas nos atrevemos a afirmar que la obra no aguantará bien el paso del tiempo. Es decir, que aguantará, pero será objeto de constantes y, esperemos, pequeñas reparaciones. Tampoco hace falta ser un adivino para afirmar que Larqué no ascenderá al Olimpo de los alcaldes por esta actuación y que a la gente sensata no le sentará bien el despilfarro que va a suponer esta prescindible e inútil obra. Seguramente no permanecerá mucho tiempo en la retina de los vecinos y vecinas de Zuera, pero no sería bueno que se olvidase antes de las próximas elecciones.