jueves, 5 de diciembre de 2013

Pillados bailando el chuminero. En el BOP se ríen del Ayuntamiento de Zuera

     
Kiko asesor del área de urbanismo en el Ayuntamiento de Zuera

Si, señoras y señores, el Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza se ha reído, no, mejor, se ha carcajeado, del concejal Larqué, responsable del área de urbanismo. Y como lo hace a través de las observaciones, verdaderamente hilarantes, que realiza a un documento preparado por el Ayuntamiento de Zuera, todos deberíamos sentirnos aludidos. Y enfadarnos. Porque, en realidad quien se esta mofando de todos nosotros es el ex alcalde, concejal urbanismo y diputado provincial D. José Manuel Larqué Gregorio.

Me explico. El 26 de noviembre del presente publica el BOP un anuncio del Consejo Provincial de Urbanismo de Zaragoza en el que, por unanimidad, acuerda no mostrar su conformidad al Texto Refundido del Plan General de Ordenación Urbana del municipio de Zuera. Y lo hace, según la información que poseemos, tras insistentes advertencias a esta incapaz administración para que elaborara un texto que refundiera todas las modificaciones que en los últimos años se han realizado en el PGOU.

Tan hartos estaban en esa Comisión de la falta de actividad del Ayuntamiento de Zuera que les habían requerido el 19 de mayo de 2011 y, en otro momento, para presionarle, habían suspendido la eficacia de algunas de las modificaciones (la 18, 19, 23 y 25). A ver si lo entienden, debían pensar. O, a ver si presionan los vecinos afectados y no les queda más remedio que ponerse en marcha.

Pues bien, por fin a los señores Larqué y Bolea le da un barrunto y se deciden: ¡¡hágase el texto refundido!!. Naturalmente, en ningún momento ni a él, ni a Bolea, ni a Gil, ni a Rodríguez, ni a Higueras, ni a Val, les dio por pensar que esa labor recopiladora podía hacerse con los recursos humanos propios del ayuntamiento, incluidos los técnicos de urbanismo (arquitecto y letrado) contratados administrativamente; digo les dio, porque semejante complicación jurídica, unir en un solo texto otros ya aprobados anteriormente, fue contratada a una empresa por la módica cantidad de 33.000 euros.

La empresa refundidora, encantada, claro. Y los técnicos de esa empresa, alguno de ellos experto (¿?) en urbanismo contratado administrativamente por el ayuntamiento, igualmente encantados. Por qué no iban a estarlo, les pagan por hacer un trabajo extra que bien podrían haber realizado en las horas que obligatoriamente deben dedicar a la institución que mensualmente les remunera. Recopilando, que es gerundio, y a ti te encontré en la calle.

Ya tenemos el texto elaborado en el Boletín Oficial de la Provincia. ¿Cuál es la conclusión que podemos sacar del trabajo que han realizado y de cómo se han gastado esas decenas de miles de euros? Nos lo cuenta el acuerdo del Consejo publicado en el boletín.

Aquí tienen un resumen de las observaciones que hacen en el apartado sexto:

“Los redactores del texto no aciertan con la Ley en vigor en este momento al actualizar o modificar artículos de las ordenanzas. Omiten textos e incorporan otros erróneamente. Remiten a quien tenga que utilizar ese documento a artículos de la Ley incorrectos. Faltan informes favorables de alguna otra institución provincial. Hacen referencia a legislación derogada y, en fin, se confunden hasta con el título de la Ley Urbanística de Aragón.”

Es tal la desidia que ha notado el funcionario que le ha tocado revisar en el Consejo Provincial la documentación, que se  nota en ese fundamento sexto un cierto cachondeo al indicarle al ayuntamiento las correcciones que debe efectuar.

Pero donde ya se llega a lo sublime es en el apartado séptimo.  El Consejo no puede aprobar el documento refundido porque incluye una modificación, la 21, todavía en tramitación y, por tanto, no ha podido ser objeto de aprobación definitiva por el Ayuntamiento de Zuera.

Si, lo que leen. Se les cayo al texto refundido la modificación 21. Como se les podía haber caído un trozo de sardina si estaban en ese momento almorzando. O, quizá se introdujo ella misma, a ver si cuela. O, mejor, un comando del Ayuntamiento de Ontinar, destinatario de la  21M, al alba y con tiempo de levante, bajó en lancha por el Gállego e introdujo la modificación de forma subrepticia.

Bochornoso. La única explicación lógica para esta nueva y vergonzosamente habitual metedura de pata es la de la foto que ilustra esta noticia: Bolea y Larqué se dedican, urbanísticamente hablando, a bailar con kiko Rivera el chuminero.
Los ciudadanos de Zuera, incluidos los que votaron al PP,  no nos merecemos esto.

Vean si no:





Aquí el documento completo en el BOP del texto refundido: http://www1.dpz.es/bop/2013/11/pdf/bop1126.pdf