El 1 de febrero de 2011, Emiliano,
colaborador y amigo de este blog, publicaba una entrada titulada “Polvos y
lodos” -puede verla si pulsa aquí-, en la que reflexionaba sobre las
características de los pactos entre PP y Par en Zuera y las consecuencias que,
inevitablemente, iban a tener para el Ayuntamiento y para el Municipio.
Entre las primeras, el que fuera
un arreglo virtual, sin documento escrito conocido que expresara claramente el
programa y la acción de gobierno, ya indicaba una de sus singularidades, el
deseo de esconder a la opinión pública el por qué, el para qué y el cómo;
aparte de lo que era evidente, echar a los socialistas del gobierno en el
Ayuntamiento de Zuera. Otra, visto lo visto, ha sido la extraña asimetría de
las competencias que fueron asumidas
por el principal partido, el PP, las menos, y el minoritario, el
Par, las más; tanto en el último mandato, el de 2007 a 2011, como
durante los ocho primeros meses del que comenzó en junio del pasado año.
Sobre las consecuencias, poco que añadir a lo que Emiliano apuntaba
en febrero de 2011, o a lo que la oposición socialista ha denunciado
reiteradamente en el último lustro: existencia de dos ayuntamientos paralelos,
ruptura de la estructura de gestión, nepotismo, falta de inversiones y
liderazgo, irregularidades varias, etcétera. Con su lógica consecuencia: el
desgobierno absoluto del municipio de Zuera.
La distancia que media desde la
ruptura de los pactos PP-Par hasta hoy, y la información de la que ahora
disponemos, nos permite poder acercarnos al “como”, a la mecánica
política negociadora que los hizo posibles, con mayor conocimiento de causa. De
eso va esta primera entrega.
Que un partido, el Par, con
un concejal, adquiriera tal preponderancia sobre el PP, con seis
concejales, fija claramente cuáles eran las exigencias, o la falta de ellas, de
cada uno de los bandos negociadores; y, además, añade algo que la derecha Marianista
de Zuera probablemente ya ha tenido en cuenta: la desproporción de competencias
municipales asumida por el Par no fue, permítasenos modificar la famosa
sentencia, el tributo que la virtud pagó al vicio, sino simplemente el producto
de la inconsistencia política, el miedo y falta de capacidad para defender las
posiciones propias de Larqué.
Primera conclusión: D. José
Manuel, aunque se dedica profesionalmente a la política, es un aficionado. Le
falta un hervor.
Poirot y Gimenels lo explican, a lo corto y menor daño, en el vídeo que les presentamos. Disfrútenlo, la próxima entrega, “Los Pactos II”, todavía es mejor, si es que eso es posible.
Poirot y Gimenels lo explican, a lo corto y menor daño, en el vídeo que les presentamos. Disfrútenlo, la próxima entrega, “Los Pactos II”, todavía es mejor, si es que eso es posible.
Josele
Buenísimo el corto......metraje. Y el corto.... corto..., el chavo. Lo peor es que fue así realmente.... Qué nivel para Zuera.
ResponderEliminarVaya trabajo de investigación, pero ¿como pudisteis infiltraros en las negociacionmes?
ResponderEliminarLo siento,no podemos hacer públicas, de momento, nuestras fuentes. Solo puedo decir que estan en lo más alto.
EliminarPoirot